Las acciones de amparo presentadas por los
propietarios de las ladrilleras situadas en inmediaciones de las Huacas del Sol
y La Luna han frenado su clausura definitiva, según manifestó el gerente municipal
del distrito de Moche (La Libertad), Adriano Barba Tirado.
Señaló que tarde o temprano todas las ladrilleras
que funcionan en La Campiña de Moche serán erradicadas debido a la contaminación
que generan, además de perjudicar el entorno paisajista de las Huacas de
Moche.
Por esta razón, la zona arqueológica no puede
todavía ser considerada por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad.
Barba Tirado indicó que actualmente hay cinco
fábricas en proceso de cierre, pero antes se tiene que cumplir con algunos
plazos legales indicados por ley, lo cual dificulta la labor fiscalizadora.
Mientras tanto, la comuna mochera ha iniciado un
trabajo de vigilancia para lograr identificar a los inescrupulosos que están
arrojando desperdicios en la carretera del sector Santa Rosa, nueva vía de
ingreso a las Huacas de Moche, lugar donde se ha acumulado gran cantidad de
desmonte y basura.
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